El Juzgado de Garantía de Coronel ha dictado prisión preventiva para Catalina Vega Montero, una mujer de 23 años, tras sustraer a su hija recién nacida del Hospital San José. Este incidente ocurrió el 18 de agosto, cuando la mujer, violando una medida de protección judicial, fue captada por las cámaras de seguridad del hospital mientras robaba a la bebé de 19 días en la unidad de Neonatología. La madre fue asistida por dos cómplices que intimidaron al personal médico para llevarse a la lactante.
La pequeña no fue localizada hasta el 20 de agosto, cuando el OS9 de Carabineros, tras allanar varios domicilios relacionados con la imputada, la encontró en buenas condiciones de salud en San Pedro de la Paz. Durante estos operativos, también se incautó una cantidad significativa de drogas, incluyendo más de 350 gramos de pasta base y más de mil papelillos de cocaína.
La fiscalía ha formalizado a Vega por tres delitos: sustracción de menor, desacato y tráfico de drogas. El fiscal Cristian Vega subrayó la gravedad de los hechos, afirmando que "hubo una intensa discusión respecto a la concurrencia de uno de estos delitos". El tribunal consideró que la mujer representa "un peligro para la sociedad" y que existe la posibilidad de que repita conductas delictivas relacionadas con las drogas.
La defensora penal pública, Silvia Aguilera, ha anunciado que apelará la decisión del tribunal. Ella argumenta que la madre actuó por miedo a perder a su hija y a sufrir vulneraciones por parte del sistema, específicamente en relación a los hogares y residencias del Sename. La lactante permanece bajo resguardo institucional mientras se lleva a cabo la investigación, que tiene un plazo de tres meses y que indaga la participación de al menos cinco personas en la sustracción.