Las pequeñas y medianas empresas (Pymes) mexicanas se encuentran ante la mayor ventana tecnológica de su historia: la inteligencia artificial (IA) que se ha convertido en un insumo productivo tan importante como el capital o el talento.
“La IA puede hacer por la pyme lo que la mecanización hizo por la manufactura: multiplicar la productividad sin disparar los costos fijos”, asevera Alejandro Escobar Bribiesca, empresario mexicano especializado en banca de inversión, servicios administrativos, seguros y benchmarking.
Recordó que en la actualidad las pymes representan 99.8 % de los establecimientos del país, generan 72 % del empleo formal y aportan 52 % del PIB.
Pese a su peso macroeconómico, sus procesos administrativos, de tesorería y de gestión de riesgos siguen dependiendo, en siete d