Tras semanas de convivencia, juegos y actividades, los niños y niñas saharauis que han pasado el verano en Durangaldea comienzan a regresar a los campamentos de refugiados de Tinduf. Ayer partió el primer grupo y hoy lo harán el resto, poniendo fin a una experiencia inolvidable. En total, este verano llegaron 40 menores, una cifra superior a la del año pasado (32), repartidos entre las asociaciones Río de Oro (12), Hamadako Izarrak (15) y 13 más acogidos por familias de la comarca.
Los niños llegan todos los veranos de los campamentos de refugiados de Tinduf. | FOTO: RÍO DE ORO
Con retraso debido a las dificultades burocráticas, la expedición saharaui llegó a mediados del pasado mes de julio. A modo de valoración, desde Río de Oro lamentaron el retraso, pero se mostraron muy satisfechos