Australia quiere blindar a los koalas ( Phascolarctos cinereus ), una especie endémica y un símbolo del país. El gobierno de Nueva Gales del Sur acaba de anunciar un ambicioso plan para proteger a estos marsupiales y garantizar su supervivencia, que las organizaciones naturalistas ponen en duda para 2050 si no se actúa con premura. 

La principal medida del gobierno de Nueva Gales del Sur pasa por proteger el Parque Nacional del Gran Koala. Se reservará 176.000 hectáreas de bosque estatal para el desarrollo de este animal y se conectará con los parques nacionales existentes para crear una reserva de 476.000 hectáreas, una de las más grandes de Nueva Gales del Sur.

Según explica este ejecutivo en un comunicado , para la puesta en marcha de esta gran reserva de koalas, un entorno único donde se procurará su conservación, se invertirán 60 millones de dólares. De acuerdo con sus cálculos, así se protegerá a más de 12.000 koalas , 36.000 petauros grandes y el hábitat de más de 100 otras especies amenazadas.

Y justifican la medida por la situación límite que viven los koalas. Si no se toman medidas, advierten, estos animales van camino de extinguirse en estado salvaje en Nueva Gales del Sur en 2050. Además, recuerdan que es compromiso adquirido con sus votantes. 

Desde la asociación naturalista WWT Australia celebran la decisión. “Este parque es una oportunidad para revertir esta tragedia y, finalmente, sacar a los koalas de la lista de especies amenazadas para el año 2050”, asegura su director ejecutivo de Dermot O'Gorman en un comunicado. 

El responsable cree que el parque servirá para salvaguardar a los koalas y garantizará que las generaciones futuras aún puedan disfrutar de bosques llenos de estos marsupiales. No hay tiempo que perder, defiende: “El número de koalas en Nueva Gales del Sur se redujo a más de la mitad entre 2000 y 2020 debido a la deforestación, la sequía, las enfermedades y los devastadores incendios forestales”. 

Sin tala de madera

Con la creación de este nuevo parque se protegerán 176.000 hectáreas donde estará prohibida la tala de madera , una actividad que altera su medio de vida, ya que estos animales pasan gran parte de su tiempo encaramados a los árboles, de acuerdo con varias investigaciones. 

EFE/ WWF

Esa moratoria en la tala de árboles vendrá acompañada de una compensación económica para las empresas que operaban ahí o dependientes de esa actividad: se aplicará un paquete integral de apoyo a los trabajadores y a la industria y se destinarán seis millones de dólares en apoyo a la comunidad y a las pequeñas empresas de la región de la costa centro-norte.