A simple vista, muchas veces puede confundirse con maleza, pero esta planta en realidad esconde una gran cantidad de propiedades y una belleza particular. Sus flores blancas y delicadas le dan un valor ornamental que sorprende a quienes la descubren en jardines o espacios naturales, y además cuenta con usos tradicionales tanto en la cocina como en la medicina.

El nombre científico de esta planta es Allium triquetrum, aunque popularmente se la conoce como lágrimas de la virgen o “ajete”. Originaria de la región mediterránea, hoy se encuentra distribuida en diferentes continentes gracias a su capacidad de adaptación. Su tallo es delgado y desprende un fuerte aroma a ajo, lo que delata su parentesco con otras especies utilizadas habitualmente en la cocina.

Además de su atractivo visual,

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