El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha desatado una tormenta política tras la descertificación de su país por parte del Gobierno de Estados Unidos en la lucha contra las drogas. Esta medida, anunciada por el Departamento de Estado, revela que Colombia no ha cumplido con los compromisos establecidos en la lucha antinarcóticos, lo que ha generado una fuerte reacción del mandatario colombiano.
Petro, a través de su cuenta de X, criticó duramente a varios sectores políticos, incluyendo al secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, quien lo calificó de "errático". En respuesta, Petro defendió su gestión, afirmando: "Arriesgué mi vida personal y familiar en la lucha contra el paramilitarismo narcotraficante". Además, subrayó que no permitirá que se golpee a los campesinos y acusó a EE.UU. de no haber reducido el consumo de cocaína y fentanilo en su territorio, lo que, según él, es la raíz del narcotráfico.
El presidente también se dirigió al expresidente Iván Duque, señalando que durante su mandato, la producción de coca aumentó en más del 60%. En contraste, Petro afirmó que su gobierno ha logrado desacelerar el crecimiento de los cultivos de coca en un 9%.
La descertificación ha llevado al gobierno de Petro a replantear su estrategia diplomática y militar con EE.UU. Aunque la cooperación bilateral se mantiene, se espera un aumento en las exigencias sobre metas y verificación. El ministro del Interior, Armando Benedetti, rechazó la idea de que la descertificación sea un chantaje, afirmando que Colombia continuará su lucha contra el narcotráfico sin ceder a presiones externas.
Petro ha indicado que su administración reducirá la dependencia militar de EE.UU., suspendiendo la compra de armas y buscando alternativas para la producción nacional. El embajador en Washington, Daniel García-Peña, defendió esta decisión, afirmando que Colombia tiene el derecho de buscar opciones que disminuyan su dependencia.
Sin embargo, la situación ha generado preocupación entre algunos sectores políticos, que advierten sobre los riesgos de escalar la confrontación con EE.UU. La representante de la Comisión II de Cámara, Juana Carolina Londoño, expresó que este tipo de declaraciones puede afectar las relaciones internacionales.
A medida que se desarrollan estos acontecimientos, la incertidumbre sobre el futuro de la relación entre Colombia y EE.UU. se intensifica, especialmente con las elecciones presidenciales en el horizonte.