Este viernes el Kremlin ha vuelto a poner a prueba la resolución de la OTAN . ¿Cómo? Ordenando a tres aviones de combate MiG 31 sobrevolar el espacio aéreo de Estonia durante un trayecto entre San Petersburgo y Kaliningrado . La incursión ha durado doce minutos, que es el tiempo que han tardado en despegar los aviones de combate italianos F-35 estacionados en la república báltica para ahuyentar a los pilotos rusos.
Horas después del incidente, la guardia fronteriza polaca anunció que dos aviones de combate rusos habían realizado un vuelo rasante sobre una plataforma petrolífera gestionada por la empresa polaca Petrobaltic en el mar Báltico . Cabe recordar que, la semana pasada, Polonia tuvo que pedir ayuda a la OTAN para detener una incursión nocturna protagonizada por u