
En uno de los ejemplos más flagrantes, un sobre con el membrete oficial del partido entregó a Ábalos 826,73 euros en junio de 2019, cuando oficialmente solo recibió 321,29 euros. La diferencia, de más de 500 euros, se suma a una cadena de irregularidades detectadas por los investigadores.
Conversaciones interceptadas y jerga de corrupción
Los mensajes extraídos de los teléfonos de Koldo y su exmujer, Patricia Úriz, son especialmente reveladores. En ellos se utiliza una jerga codificada con términos como chistorra , lechuga o sol para referirse a billetes de 500, 100 y 200 euros respectivamente. Estas pruebas digitales apuntan a una estructura organizada de pagos opacos , con recogidas de sobres en "cajones" de Ferraz y entregas dirigidas directamente al despacho del ministro.
Una operativa con implicaciones de partido
El informe de la UCO concluye que este entramado de pagos en B no era un hecho aislado, sino parte de una operativa sostenida que involucra a personal de la Secretaría de Organización del PSOE. Se menciona a Celia Rodríguez Alonso y Covadonga San Pedro Pascual, empleadas del partido, como piezas logísticas clave en la cadena de distribución del dinero en metálico.
El exministro Ábalos habría recibido sobres de forma reiterada entre 2014 y 2020, acumulando ingresos en efectivo por valor de 60.270 euros, de origen no justificado. A su vez, las retiradas en cajeros superaron los 22.000 euros, alcanzando su pico en 2020, en plena pandemia.
¿Camino a la imputación del PSOE?
Los indicios acumulados por la Guardia Civil llevan a los investigadores a contemplar un escenario de financiación ilegal del PSOE . El artículo 304 bis del Código Penal establece penas de hasta cinco años de prisión por esta tipología delictiva, si se demuestra que las cantidades ingresadas eran destinadas al partido y no fueron declaradas.
La responsabilidad penal del partido podría quedar acreditada si se demuestra que los fondos eran controlados por cargos con autoridad dentro del aparato. Las referencias directas a Santos Cerdán y al entonces gerente del PSOE, Mariano Moreno Pavón, complican aún más la situación.
Una bomba política en plena crisis institucional
Este nuevo escándalo llega en un contexto de parálisis política y creciente desconfianza ciudadana hacia el Gobierno de Pedro Sánchez. La cercanía entre el núcleo del presidente y los protagonistas de la llamada Trama Koldo podría tener consecuencias judiciales y electorales de gran calado.
El caso ya ha provocado la reacción de voces críticas dentro del propio PSOE y ha dado alas a la oposición, que exige la dimisión inmediata de los implicados y una auditoría externa de las cuentas del partido.