La foto que abre esta noticia perseguirá a Raquel Sánchez Silva durante años. Es en el entierro de su marido, su cámara de Supervivientes Mario Biondo , italiano, con barba, guapo, joven. Apareció en el domicilio de Raquel colgado de una viga. La versión de la presentadora de Telecinco, ahora en TVE con Maestros de la costura , fue que había sido un juego autoerótico de asfixia que acabó mal. Ahora la justicia niega esta versión y confirman que no fue un suicidio y todo apunta a un crimen. Han tenido que pasar 12 años de la larga lucha de la familia Biondo arrastrándose por los tribunales, los italianos y los españoles y finalmente la Audiencia Provincial de Madrid, el lugar donde Mario apareció muerto, ha dictaminado que aquella muerte no fue un suicidio.
La resolución da áni