La sesión de control al Gobierno celebrada este miércoles en el Congreso ha sido un auténtico campo de batalla política. En un ambiente cargado de tensión, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo , ha anunciado que Pedro Sánchez será citado a declarar en octubre ante la comisión de investigación del Senado sobre el ‘caso Koldo’ . El presidente del Gobierno, visiblemente incómodo, respondió entre risas con un irónico «¡Ánimo, Alberto!» , mientras su bancada estallaba en aplausos.

La cita parlamentaria se convirtió en una exhibición de reproches mutuos. La oposición centró el debate en la corrupción que asfixia al PSOE , con referencias directas a los escándalos que involucran a José Luis Ábalos, Koldo García, Begoña Gómez y David Sánchez , hermano del presidente. « Corrupción, corrupción y más corrupción. La presunta, la sospechada y la comprobada », llegó a decir uno de los diputados populares al salir del hemiciclo.

Feijóo: «Es imposible no haber delinquido sin usted»

Feijóo no se guardó nada. En un discurso directo y severo, acusó a Sánchez de haber convertido la política española en un laberinto de causas judiciales , señalando que los casos del ‘hermano’, la ‘esposa’ y los ‘ministros caídos’ forman parte de un mismo entramado de poder.

« La corrupción no es una invención. Es imposible haber delinquido sin usted, señor Sánchez », lanzó Feijóo desde la tribuna, en referencia a los sobres de dinero, las comisiones ilegales y los contratos públicos bajo investigación. El líder del PP aseguró además que el presidente «deberá decir la verdad» cuando comparezca en el Senado entre el 21 y el 30 de octubre: « Hasta aquí, se acabó la huida. En la Cámara Alta no podrá esconderse tras la propaganda ni la arrogancia ».

El presidente del PP pidió a Sánchez que preguntara en Ferraz por las “chistorras” , el nombre en clave con el que los implicados en el ‘caso Koldo’ se referían a los billetes de 500 euros transportados en sobres. « Esos sobres no eran metáforas, eran pagos reales. Y salían de su partido », insistió Feijóo.

Sánchez responde con evasivas y ataques ideológicos

El presidente del Gobierno evitó entrar en el fondo del asunto y optó por desviar el debate hacia otros temas . Desde su escaño, Sánchez se aferró a la página 28 del informe de la UCO, afirmando que las acusaciones de Feijóo son «absolutamente falsas» , y trató de volver el foco hacia la sanidad andaluza y los derechos sociales .

« Ustedes defienden a la élite de siempre », replicó el presidente, acusando al PP de «defender sólo los intereses de la sanidad privada» y de oponerse a la reforma constitucional que pretende incluir el derecho al aborto en la Carta Magna . También atacó al PP por su postura ante el embargo de armas a Israel, intentando revestir de progresismo moral su defensa política .

Sin embargo, la oposición no tardó en señalar que esas maniobras discursivas son una cortina de humo , diseñada para evitar rendir cuentas por la corrupción sistémica que se extiende por el PSOE .

295 cuentas sin fiscalizar y sobres con billetes de 500 euros

Feijóo insistió en que el PSOE «ha perdido toda autoridad moral» , recordando las informaciones judiciales que apuntan a la existencia de 295 cuentas bancarias no incluidas en la contabilidad del partido .

« Todo esto no es una invención, señor presidente. Es su biografía. Es la historia del sanchismo, escrita con sobres, favores y silencios », afirmó el líder del PP, enumerando los casos de Ábalos, Cerdán, Koldo, Begoña Gómez y David Sánchez , y las conexiones detectadas por la Guardia Civil entre los pagos irregulares y los gastos personales de altos cargos socialistas.

El líder popular acusó además a Sánchez de “haber bendecido” la corrupción con su silencio , y de haberse reído del pueblo español al reaccionar con carcajadas en el hemiciclo ante las alusiones al dinero negro en Ferraz.

El PSOE trata de normalizar el escándalo

Mientras tanto, en los pasillos del Congreso, varios portavoces del PSOE intentaron rebajar el impacto mediático del caso , describiendo el movimiento de efectivo como «una práctica interna habitual» en los procesos de financiación territorial del partido. La frase, reproducida por El Mundo , ha causado estupor incluso entre socialistas veteranos.

Un antiguo dirigente del PSOE confesaba a este diario: « Llamar “práctica habitual” a lo que puede ser financiación irregular es una vergüenza. Este partido ha perdido el rumbo ético ».

Las palabras resumen el desconcierto que reina en Ferraz , donde crece el malestar por la falta de explicaciones y el temor a que la Comisión del Senado destape una red de pagos opacos de magnitud desconocida.

El Gobierno, cercado por los suyos

Con el paso de los meses, la lista de escándalos que cercan al Ejecutivo de Pedro Sánchez se ha vuelto inabarcable : el ‘caso Koldo’ , la investigación a Begoña Gómez , el proceso judicial contra David Sánchez , y las revelaciones sobre los gastos no fiscalizados de Ábalos y Cerdán .

El propio PSOE ha admitido ya que no se fiscalizaron correctamente los pagos internos de los ministerios y organismos controlados por sus dirigentes , saltándose su propio reglamento de auditoría.

Para Feijóo, todo esto compone «un retrato completo de la descomposición del sanchismo» , un movimiento que —según afirmó— «ha traicionado la socialdemocracia y ha sustituido la ética por la impunidad» .