Este lunes, 27 de octubre, la revista SEMANA reveló un documento reservado de la inteligencia militar que arroja luz sobre el asesinato de alias Jenny, quien era la mano derecha de alias Iván Mordisco, líder de las disidencias de las FARC. Aunque el grupo había afirmado que Jenny murió en un bombardeo de las fuerzas armadas, el informe del Ejército Nacional sugiere que su muerte fue el resultado de una guerra interna motivada por celos y luchas de poder. El informe detalla que la muerte de alias Jenny no fue consecuencia de operaciones militares, como se había sostenido. En cambio, se menciona que su posición de liderazgo, al mando de al menos 70 hombres, generó celos y disputas internas. "La realidad sería muy diferente, y esta involucraría disputas internas, celos por ser prioridad con el cabecilla, traición e intereses por bienes y propiedades", señala el documento. Alias Lorena, pareja de Mordisco, es identificada como la principal sospechosa del asesinato, ya que veía a Jenny como una amenaza a su relación. La inteligencia militar indica que "siempre había tenido varios roces y choques con alias Lorena... Los celos siempre estaban presentes". Alias Jenny era responsable de corredores estratégicos de narcotráfico en Caquetá y Amazonas, y había sido designada para manejar el tráfico internacional de estupefacientes entre Colombia y Brasil. Además, se menciona que practicaba brujería junto a otros miembros del grupo para evadir a las fuerzas militares. El plan para asesinar a Jenny fue orquestado por Lorena, quien actuó con aparente lealtad mientras tramaba su muerte. Según el informe, Lorena aprovechó un movimiento de disidentes para llevar a cabo el crimen. Jenny fue capturada, le dispararon en la cabeza y su cuerpo fue fotografiado para enviar pruebas a Lorena de que el plan había tenido éxito. Posteriormente, para evitar represalias de Mordisco, se creó la narrativa de que Jenny había sido víctima de un ataque del Ejército Nacional. El informe concluye señalando que Jenny también estaba implicada en el reclutamiento forzado y en crímenes contra comunidades indígenas en la Amazonía, así como en acciones terroristas contra la Fuerza Pública y homicidios selectivos. La revelación de este informe pone de manifiesto la complejidad de las luchas internas dentro de las disidencias de las FARC y el papel que jugaban sus líderes en la perpetuación de la violencia en la región.