Madrid. El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha decretado el confinamiento de todas las aves de corral que se crían al aire libre en España, a partir de este jueves. Esta medida busca reforzar las acciones preventivas ante el aumento del riesgo de expansión de la gripe aviar, una enfermedad altamente infecciosa. La orden ministerial, publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE), se aplica a todas las granjas avícolas, incluidas las explotaciones ecológicas y las de autoconsumo, así como aquellas que producen carne o huevos para la venta directa al consumidor. La prohibición de que los animales permanezcan al aire libre ya estaba vigente desde el pasado lunes en 1.201 municipios considerados de especial riesgo. La decisión se ha tomado tras un incremento en el riesgo de entrada de la enfermedad en España en la última semana. Para evaluar este riesgo, se han considerado factores como el número de focos notificados en Europa, su localización y los movimientos de aves silvestres desde zonas de riesgo. Una granjera ha expresado su preocupación: "Si entra la enfermedad habría que sacrificar a todas las gallinas. Sería la ruina total". En España, se ha observado una abundancia de aves migratorias en zonas de humedales, lo que es habitual en esta época del año. Además, el descenso de las temperaturas favorece la supervivencia del virus. Las medidas de confinamiento buscan evitar el contacto entre las aves de corral y las migratorias, que pueden ser portadoras del virus. Desde julio, se han notificado 139 brotes de gripe aviar en granjas avícolas de Europa. En España, se han registrado 14 focos en explotaciones, la mitad de ellos en Castilla y León, además de 53 en aves silvestres y 5 en cautivas. Hasta el momento, no se ha reportado ningún contagio en humanos. La orden también incluye varias restricciones adicionales: se prohíbe la cría de patos y gansos junto a otras especies de aves de corral, así como proporcionar agua a las aves de corral desde depósitos accesibles a aves silvestres, a menos que el agua sea tratada para inactivar posibles virus. Los depósitos de agua al aire libre deben estar protegidos contra aves acuáticas silvestres. Asimismo, se prohíbe la presencia de aves de corral en centros de concentración de animales, como certámenes ganaderos y exhibiciones. En caso de que no sea posible el confinamiento, las comunidades autónomas podrán autorizar el mantenimiento de las aves al aire libre mediante la colocación de telas pajareras u otros dispositivos que impidan la entrada de aves silvestres. Las aves deberán alimentarse y beber en el interior de las instalaciones o en refugios que eviten el contacto con aves silvestres y sus alimentos.