Una jueza federal desestimó los casos criminales contra el exjefe del FBI, James Comey, y la fiscal general de Nueva York, Letitia James. La decisión se basa en que la fiscal que presentó los cargos, a solicitud del expresidente Donald Trump, fue designada de manera ilegal por el Departamento de Justicia.
La jueza argumentó que la falta de legalidad en la designación de la fiscal afecta la validez de los cargos presentados. Comey y James habían sido objeto de acusaciones que generaron gran atención mediática.
La decisión de la jueza representa un revés significativo para los intentos de Trump de perseguir a sus críticos. La fiscalía había sostenido que los cargos eran necesarios para mantener la justicia, pero la jueza concluyó que el proceso no cumplió con los requisitos legales.
Ambos, Comey y James, han enfrentado críticas y controversias en el pasado, pero esta resolución judicial podría cambiar el rumbo de sus respectivas situaciones legales. La desestimación de los casos se considera un hito en el contexto de las tensiones políticas actuales.

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