Un cabo primero de la Fuerza Aérea de Chile (FACh) está bajo proceso judicial por falsificación informática. Se le acusa de haber intervenido de manera no autorizada en un sistema de la institución para eliminar su nombre de los turnos de guardia en la Base Aérea Los Cerrillos. La Fiscalía de Aviación de Santiago inició la investigación en agosto de este año. Actualmente, el caso se encuentra en la justicia militar, aunque la defensa del cabo ha solicitado que sea trasladado a la justicia ordinaria. El funcionario se encuentra en prisión preventiva en el Centro de Detención de la Guarnición Aérea El Bosque, a la espera de que la Corte Suprema decida sobre la competencia entre el Noveno Juzgado de Garantía de Santiago y la Fiscalía de Aviación. Según los antecedentes del caso, el cabo primero Oscar Garrido, quien era considerado un destacado profesional en el Centro de Informática y Computación, habría utilizado sus conocimientos para beneficio personal. El 29 de julio, a las 09:25 horas, se le acusa de haber accedido a la base de datos del Sistema Gestor de Servicios (SISGESERV) mediante un programa externo, con el fin de eliminarse del listado de "centinelas", es decir, del personal encargado de los turnos de guardia. Para llevar a cabo esta acción, Garrido habría utilizado el programa Toad for Oracle, lo que quedó registrado en el historial de su computador. Al ser consultado sobre la situación, el cabo defendió su actuación alegando que otros podrían haber utilizado sus credenciales de acceso. "Desde la época de la pandemia, compartir mis credenciales personales con compañeros de trabajo se volvió una práctica habitual para resolver emergencias rápidamente", declaró. La irregularidad fue detectada por un suboficial mayor a cargo del SISGESERV, quien notó que Garrido había dejado de formar parte del rol de centinela sin razón aparente. Tras realizar pruebas informáticas, se comprobó que las modificaciones se habían hecho desde el computador asignado al cabo. El informe técnico elaborado por el comandante de escuadrilla Francisco Gutiérrez Muñoz fue presentado al general de aviación Máximo Venegas Raggio, quien a su vez lo remitió a la Fiscalía de Aviación de Santiago. El fiscal Ángelo Figueroa tomó conocimiento de los hechos y consideró que la situación era grave. Si es hallado culpable, Garrido podría enfrentar hasta cinco años de prisión por el delito de falsificación informática.