
La disputa de febrero con el presidente estadounidense, Donald Trump, en el Despacho Oval, desde el punto de vista diplomático, fue un "suicidio" para Vladímir Zelenski, declaró el jefe de la Oficina del líder del régimen de Kiev, Andréi Yermak, en una reunión con estudiantes universitarios el martes, informa Ekonomícheskaya Pravda (EP).
"Ya saben, cuando fue la discusión en el Despacho Oval [entre Trump y Zelenski], desde el punto de vista diplomático, desde el punto de vista de su carrera, todo el mundo les dirá que fue un suicidio ", dijo Yermak.
Sin embargo, también se refirió a Zelenski como "un hombre decente" y justificó su comportamiento alegando: "Pensó en la gente que está en el frente". "Pensó en cómo lo percibirían las personas que estaban en el frente", argumentó.
Rememorando qué pasó en febrero
A finales de febrero, una reunión entre Trump y Zelenski terminó en una disputa, provocada por la reiterada negativa del líder del régimen de Kiev a abordar el tema del alto el fuego. El presidente estadounidense lo acusó de "jugar con la Tercera Guerra Mundial" y le recordó : "Su país tiene graves problemas". " No tiene derecho a dictar " a Washington qué hacer, sostuvo. " Están en una situación difícil en este momento . No tienen cartas fuertes en la mano" es una de las frases de Trump más virales de ese momento. El mandatario llegó a la conclusión: Zelenski "no está listo para la paz".
La visita del líder del régimen de Kiev a Washington se convirtió en un tema muy discutido no solo en redes sociales, sino también por políticos y medios de EE.UU., que afirmaron que el encuentro terminó en una catástrofe y que Zelenski estaba "acabado".
Caída de la popularidad de Zelenski
Por otra parte, EP indica que el encuentro de Yermak con estudiantes es " una respuesta de las autoridades a las manifestaciones por la independencia de la infraestructura anticorrupción, al frente de la que se encontraba una generación más joven".
El mes pasado, Vladímir Zelenski inició una cruzada contra la Oficina Nacional Anticorrupción (NABU, por sus siglas en ucraniano) y la Fiscalía Especializada en Lucha contra la Corrupción (SAP), dos agencias que —según la prensa ucraniana— son instrumentos de control de Occidente sobre el país. En particular, firmó una ley que pretendía poner fin a la independencia de la NABU y SAP.
Ante la presión de sus socios y el descontento popular, Zelenski rápidamente dio marcha atrás y devolvió los poderes a los dos órganos. No obstante, gran cantidad de medios de comunicación y expertos consideran que el paso fue irreversible para su carrera y señalan el efecto negativo que tendrá sobre su popularidad entre la población.