El DNU 351 proponía modificar el funcionamiento del Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG) , un organismo clave en causas de lesa humanidad . La medida quitaba la autarquía y lo convertía en un ente desconcentrado bajo la órbita de la Jefatura de Gabinete.
La norma también cambiaba la conducción del banco. Eliminaba el cargo de Subdirector Administrativo y dejaba la dirección en manos de un Director Técnico y un Subdirector Técnico, designados por concurso público. Además, todos los recursos presupuestarios se transferían a la Jefatura de Gabinete.
Desde el Poder Ejecutivo, la justificación fue que la medida buscaba “reducir el gasto público” y “simplificar la estructura estatal” sin afectar las competencias. Sin embargo, organismos de derechos humanos cuestionaron el decre