Mantener la ropa con un aroma agradable no siempre depende de los jabones o suavizantes utilizados en el lavado. Muchas veces, el secreto está en los pequeños gestos cotidianos que realizamos antes, durante y después de limpiar las prendas. La buena noticia es que no hace falta invertir en productos costosos: con algunos cuidados básicos se puede lograr que las telas conserven frescura por más tiempo.
Uno de los aspectos fundamentales es el secado . Cuando la ropa no se airea bien, aparecen olores indeseados aunque se haya utilizado un jabón de calidad. Lo ideal es colgar las prendas en un lugar ventilado y, de ser posible, al sol , ya que los rayos UV ayudan a eliminar bacterias . Evitar dejarlas demasiado tiempo dentro del lavarropas también es clave, porque la humedad f