De castaño a oscuro. Así está la situación en el Valle del Cauca en donde del impacto por la explosión del carro-bomba el jueves pasado en inmediaciones de la escuela de aviación militar Marco Fidel Suárez, que dejó seis personas asesinadas y decenas de heridos, se pasó ahora a la máxima preocupación por las informaciones de inteligencia según las cuales las disidencias de las Farc tendrían planes para atentar contra el alcalde de Cali, Alejandro Eder, y la gobernadora Dilian Francisca Toro.

Se trata de una situación bastante grave no solo porque el Valle ha sido blanco de distintas oleadas terroristas en el último año, sino porque tanto el burgomaestre como la titular departamental han liderado personalmente la estrategia de seguridad para hacerle frente al creciente desafío de los crimi

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