Lima norte se prepara para recibir una infraestructura sin precedentes: su primera planta desalinizadora, ubicada en el distrito de Ancón.

Este proyecto, impulsado por Proinversión con respaldo del Ministerio de Vivienda, busca transformar agua de mar en agua potable con el objetivo de atender a miles de familias que sufren limitaciones en el acceso diario a este recurso básico.

La iniciativa forma parte de un esquema de Asociación Público-Privada (APP) autofinanciada, lo que significa que la inversión —estimada en US$ 204.77 millones — será cubierta íntegramente por capital privado.

De esta manera, el Estado no tendrá que destinar recursos propios, lo que facilita acelerar el inicio de la obra y su futura operación.

Con una capacidad proyectada de 86,400 metros cúbicos de agua

See Full Page