En un mundo donde las tensiones geopolíticas alcanzan niveles críticos y los conflictos globales amenazan con escalar, Estados Unidos compartió lo que podría convertirse en su arma más decisiva: el F-47 , un caza de sexta generación.
Este avión de combate secreto , desarrollado por Boeing bajo el programa Next Generation Air Dominance (NGAD) , no es solo una evolución tecnológica, sino un salto cuántico que podría definir el equilibrio de poder militar en las próximas décadas.
Sin embargo, la Fuerza Aérea de Estados Unidos mantuvo un velo de secretismo tan espeso que incluso las imágenes oficiales fueron deliberadamente distorsionadas para confundir a la inteligencia extranjera, convirtiendo cada filtración en una posible operación de desinformación.
El engaño perfecto: cua