La incertidumbre rodea la presencia de Javier Milei en el búnker de La Libertad Avanza en Buenos Aires, donde los libertarios enfrentan con cautela las elecciones de este domingo. Existen preocupaciones sobre el impacto de las recientes denuncias de corrupción en la participación electoral y en el apoyo de los votantes. Las filtraciones de audios que involucran al Presidente y a su hermana han generado desconfianza entre aquellos que apoyaron a Milei por primera vez en 2023.

El temor a que estas acusaciones, que implican sobornos, desincentiven la asistencia a las urnas es palpable. En el Gobierno, se proyecta una participación de solo entre el 50 y el 60 por ciento, una cifra que podría ser aún más baja en una elección legislativa provincial. Además, hay inquietudes sobre el voto de los indecisos, que podrían optar por fuerzas no kirchneristas, como el PRO, en lugar de apoyar a los libertarios.

Los organizadores de La Libertad Avanza no se atreven a hablar de fraude, pero creen que sus voluntarios no serán suficientes en las zonas más complicadas del conurbano. Un miembro del equipo de Milei recordó que en las elecciones ejecutivas de 2023 recibieron apoyo de un sector del peronismo, algo que no se repetirá en esta ocasión.

La estrategia de campaña ha cambiado. Inicialmente, el Gobierno mostraba temor a una derrota ante el kirchnerismo, pero ante el clima de acusaciones por corrupción, se vieron obligados a adoptar un tono más optimista. Un funcionario admitió: "Nada está dicho, vamos con mucho cuidado". A pesar de la incertidumbre, confían en que el panorama será más favorable en las elecciones nacionales de octubre.

En el búnker de Balcarce 50, se destacan logros como la reducción de la inflación y el apoyo a un discurso de seguridad que resuena con los votantes afectados por la delincuencia. Sin embargo, también enfrentan críticas por recortes en fondos para discapacidad y salud, lo que ha generado controversia.

Si Milei no obtiene un buen resultado, es probable que no se presente en el salón donde se espera el resultado. Solo su hermana y otros líderes de La Libertad Avanza estarán presentes. En el Gobierno, se repite que una derrota por 2 o 3 puntos podría considerarse un triunfo, pero una diferencia mayor a 5 sería vista como un desastre. Este escenario, aunque preocupante, es considerado poco probable por los más pesimistas dentro del partido.