El Gobierno tomó nota de la paliza electoral del domingo y en silencio comenzó a modificar su política económica. Horas después de que el Presidente ratificara el rumbo desde el bunker, el equipo de Luis Caputo inició el lunes una discreta reducción de las tasas y prepara nuevas medidas , con el objetivo de aflojar el apretón monetario y darle un respiro a la golpeada actividad antes de los comicios del 26 de octubre.

En esa línea, el Banco Central busca flexibilizar el control de encajes bancarios , pasando de una medición diaria a un ajuste cada 3 días. Es un guiño al sector, que pedía un alivio tras el endurecimiento monetario para contener el dólar. La idea es alentar la baja de tasas en marcha con menores exigencias de liquidez a los bancos, que desde hace dos semanas afrontan en

See Full Page