Una controversia significativa ha surgido tras las declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien recomendó a las mujeres embarazadas evitar el uso de acetaminofén, sugiriendo una posible relación entre este medicamento y el autismo. Trump afirmó: “Hace apenas unas décadas, uno de cada 10.000 niños tenía autismo. Ahora, es uno de cada 31. Desde el año 2000, las tasas de autismo han aumentado mucho más del 400 %. En lugar de atacar a quienes hacen preguntas, todos deberíamos estar agradecidos con quienes intentan obtener las respuestas.”
La comunidad médica ha reaccionado con preocupación ante estas afirmaciones. Colin Killick, director ejecutivo de la Red de Autodefensa del Autismo, declaró al The Washington Post que las autoridades están “manipulando” los hechos al sugerir una conexión entre el Tylenol y el autismo, sin realizar un análisis científico riguroso.
Steven Fleischman, presidente del Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos, también criticó las declaraciones de Trump, afirmando que “no están respaldadas por toda la evidencia científica” y que simplifican en exceso las complejas causas de los trastornos neurológicos infantiles.
La Red de Autodefensa del Autismo expresó su firme oposición al discurso del presidente, señalando: “Hoy, el presidente ofreció una conferencia de prensa con Robert F. Kennedy Jr. y otros miembros del equipo directivo del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS). Durante la conferencia, los oradores compartieron información dañina y falsa sobre el autismo, el acetaminofén y las vacunas.”
En medio de esta controversia, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, se unió al debate a través de su cuenta personal en X. Escribió: “Decía el filósofo Gyorgy Lukács: antes del fascismo en el poder, hay un ascenso del irracionalismo en la sociedad.” Petro continuó explicando que “el irracionalismo consiste en negar la ciencia, en pensar que no podemos pensar la realidad. Se niega la vacuna, se niega la crisis climática, se niega la humanidad.”
La discusión sobre el acetaminofén y su relación con el autismo continúa generando reacciones y preocupaciones en diversos sectores de la sociedad.