Las excavadoras trabajaban día y noche durante horas para encontrar cuerpos, de mujeres o de fetos, en una casa en Lagos de Moreno, Jalisco: se trataba de un burdel, llamado “Guadalajara de Noche”, operado por las hermanas González Valenzuela, también conocidas como Las Poquianchis.
La mañana del 18 de enero de 1964, mientras el resto del mundo se rendía ante The Beatles, que se preparaba para hacer su primera gira en Estados Unidos, en el occidente de México las autoridades hallaron el fémur de un pequeño de alrededor de cuatro años de edad, así como vértebras, zapatos, medias y prendas íntimas de mujer, huesos animales y huesos de humano, en una aparente fosa común cavada por las hermanas.
Ahí mismo, también se localizó una fosa séptica de tres metros de profundidad, que, hasta su mita