El Gobierno nacional está considerando convocar a sesiones extraordinarias en el Congreso para debatir reformas laborales y tributarias. Esta decisión podría tomarse una vez que finalice el período ordinario el 30 de noviembre. Los proyectos son fundamentales para la segunda mitad del mandato del presidente Javier Milei, quien se beneficiará de una nueva composición legislativa más favorable tras las recientes elecciones.

Fuentes cercanas al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y al presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, han indicado que es "posible y probable" que se convoquen estas sesiones, ya que ambos proyectos son considerados "prioridades" por el Gobierno.

La reforma laboral, impulsada por la diputada Romina Diez, busca transformar las condiciones laborales en Argentina. Entre sus propuestas se incluyen la ampliación de la jornada laboral, la flexibilización de convenios y la posibilidad de pagar indemnizaciones en cuotas. Además, se redefiniría el principio de irrenunciabilidad en la Ley de Contrato de Trabajo, otorgando mayores facultades a los empleadores para modificar las modalidades de trabajo, siempre que no sean irrazonables.

El proyecto también establece nuevos plazos para impugnar sanciones disciplinarias y amplía los beneficios sociales no remunerativos, como almuerzos y acceso a internet. En cuanto a las remuneraciones, se permitirá el pago en efectivo, cheque o acreditación bancaria, y se introducirá la instrumentación electrónica de los recibos de sueldo.

Por otro lado, la reforma tributaria y previsional también está en la agenda del Gobierno. El ministro del Interior, Lisandro Catalán, ha destacado el trabajo del Consejo de Mayo, que incluye a legisladores y empresarios, en la elaboración de estas iniciativas. Catalán ha expresado su optimismo sobre la posibilidad de llegar a acuerdos con gobernadores peronistas no kirchneristas para avanzar en estas reformas.

El Gobierno busca aprovechar su mayor peso político en el nuevo Congreso para impulsar estas reformas estructurales, que son consideradas centrales para su programa económico y laboral. La reforma laboral incluye cambios significativos, como la creación de un "banco de horas" y la eliminación de indemnizaciones por despido, que serían reemplazadas por un fondo de cese laboral.

Con la nueva conformación legislativa, el oficialismo espera avanzar en estos proyectos que podrían tener un impacto significativo en el mercado laboral y en la economía del país. La convocatoria a sesiones extraordinarias podría ser un paso crucial para llevar a cabo estas reformas en el corto plazo.