Una nueva ola de aire ártico está a punto de azotar a más de 200 millones de personas en Estados Unidos, tras una reciente tormenta invernal. Las temperaturas caerán drásticamente en las llanuras, el Medio Oeste, los Grandes Lagos y el noreste del país. Se prevé que las temperaturas máximas se sitúen entre 15 y 25 grados Fahrenheit (entre -9 y -15 grados Celsius) por debajo de lo normal, alcanzando apenas los 10 grados Fahrenheit (12 grados Celsius) en algunas áreas de las Dakotas. El miércoles, el frío intenso proveniente de Canadá descenderá sobre el Alto Medio Oeste. La mañana del jueves se anticipa como la más fría, con temperaturas reales que podrían caer a valores de dos dígitos bajo cero en Fahrenheit, especialmente en Iowa y Nebraska, donde se esperan temperaturas entre -10 y -19 grados Fahrenheit (-23 a -28 grados Celsius). Las sensaciones térmicas podrían oscilar entre -10 y -25 grados Fahrenheit (-23 y -32 grados Celsius). Ciudades como Des Moines y Cedar Rapids están preparadas para romper récords de temperatura mínima el jueves, con pronósticos de -11 grados Fahrenheit (-24 grados Celsius) y -7 grados Fahrenheit (-22 grados Celsius), respectivamente. En Cedar Rapids, la temperatura máxima podría no superar los 9 grados Fahrenheit (-13 grados Celsius), estableciendo un nuevo récord de frío. El frío no se limitará al Medio Oeste. Se espera que el viernes, desde Illinois hasta la Costa Este, se registren temperaturas mínimas récord. Chicago podría caer por debajo de su récord diario de 4 grados Fahrenheit (-16 grados Celsius), mientras que Indianápolis podría acercarse a su récord de 8 grados Fahrenheit (-13 grados Celsius), establecido en 1886. En Nueva York, la mañana del viernes será la más fría desde marzo, con temperaturas mínimas cercanas a 20 grados Fahrenheit (-7 grados Celsius). Las sensaciones térmicas serán severas, afectando a varias ciudades. Este fenómeno se atribuye al debilitamiento del vórtice polar, que ha permitido que el aire frío se desplace hacia el sur, afectando a zonas densamente pobladas. La meteoróloga Andrea López Lang, de la Universidad de Wisconsin-Madison, explicó que este aire frío choca con aire más cálido, lo que puede generar condiciones más tormentosas. Además, se anticipa que el vórtice polar se extenderá aún más sobre Norteamérica en los próximos días, lo que podría traer otra ola de frío a mediados de diciembre. A pesar de que el invierno oficial comienza en tres semanas, las condiciones invernales ya están haciendo sentir su presencia en el país. Los meteorólogos advierten que, aunque el vórtice polar es un factor importante, no es el único que influye en las fluctuaciones de temperatura que se esperan en las próximas semanas. La situación meteorológica se mantendrá bajo vigilancia a medida que se desarrollen las condiciones invernales en el país.