La decisión del presidente Donald Trump de despedir a la directiva de la Reserva Federal (Fed) Lisa Cook ha marcado una drástica escalada en sus esfuerzos por controlar el banco central estadounidense, una postura que pone en riesgo la independencia de la institución.
Durante meses, el mandatario estadounidense ha pedido al banco que recorte drásticamente las tasas de interés, criticando repetidamente al presidente de la Fed, Jerome Powell, por llegar «demasiado tarde» y calificándolo de «imbécil».
Sin embargo, los responsables de la política monetaria han mantenido estables los tasas de interés mientras monitorean los efectos de los amplios aranceles de Trump sobre los precios.
Al destituir a Cook, el presidente podría añadir una nueva voz a la junta directiva de la Fed para intentar i