El exgerente del PSOE Mariano Moreno y una empleada de la formación, Celia Rodríguez, han negado este miércoles en el Tribunal Supremo la existencia de posibles descuadres en la contabilidad del partido, tal y como planteaba un informe de la Unidad Central Operativa (UCO) incorporado a la causa que se sigue contra José Luis Ábalos, Koldo García, Santos Cerdán y Víctor de Aldama.

Ambos han explicado que las diferencias entre las cantidades de gastos pagados que el PSOE había declarado y las cantidades de las que hablaban los implicados en conversaciones incautadas, en ocasiones acompañadas de fotos con sobres de dinero, responden a que esos montantes no eran exclusivamente para Ábalos, sino que en ellas iban incluidos los reembolsos que había que hacer a otros miembros de la Secretaría de Organización del partido.

Celia Rodríguez ha explicado que Koldo García se encargaba de distribuir ese dinero entre los miembros de la Secretaría de Organización que habían puesto de su bolsillo para gastos vinculados al partido, informan fuentes presentes en la declaración. Si se suman esas cantidades, ha explicado, las cantidades cuadran, ha añadido.

Por su parte, el exgerente ha insistido en que todo el dinero en metálico tiene una procedencia legal, ya que salía de una cuenta del partido en una entidad bancaria nutrida de las subvenciones que recibe el partido. Ha explicado que las retiradas están justificadas y procedían de la citada cuenta. De este modo, ambos testigos han coincidido con la tesis trasladada en el escrito entregado por el PSOE el pasado viernes en el Tribunal Supremo, en el que se adjuntan los justificantes de retiradas en efectivo desde 2017 a 2024 por un valor total de casi un millón de euros.

Moreno, según las citadas fuentes, ha admitido que no se fiscalizaban si los gastos que pasaban Ábalos y el resto de miembros del partido tenían una justificación en la actividad en el marco del mismo. Pero ha asegurado que, en cualquier caso, eran gastos habituales de comidas, viajes o vuelos de avión. Uno de los abogados ha llegado a preguntarle si hubiera pasado el filtro un ticket por el pago de una bicicleta y Moreno ha respondido que no.

La declaración del exgerente y la encargada de la caja del PSOE se produce días después de que el partido registrara el citado escrito en el que detalló los abonos en efectivo desde 2017 a Ábalos, Koldo García, Cerdán y la Secretaría de Organización de la formación para liquidar determinados gastos supuestamente justificados. El partido reconoció que llegó a manejar en metálico casi un millón de euros para todo tipo de gastos de la formación durante los ejercicios que abarca la investigación del Supremo (2017-2024). Todos esos fondos procedían de su cuenta oficial, nutrida de las subvenciones legales que recibe el partido.

El juez citó a Moreno y Rodríguez después de que la UCO detectara “la existencia de ciertas comunicaciones relativas a posibles pagos en metálico de determinadas cantidades” a ambos Ábalos y Koldo García por parte del PSOE que “no constarían” por sus fechas ni por sus importes en la información facilitada por el partido al alto tribunal.

El juez señaló que, en algunos casos, las conversaciones incautadas a Koldo García “permiten establecer una correlación entre los mensajes que apuntan a entregas de dinero y las liquidaciones de gastos” facilitadas por la formación. En otras, sin embargo, “no se ha podido confirmar dicha correspondencia”. Esas cantidades entregadas sólo estarían reflejadas en las conversaciones, pero no en la información proporcionada por el PSOE.

El juez citó a ambos después de que Ábalos y Koldo García se acogieran a su derecho a no declarar los pasados días 15 y 16 julio. El magistrado argumentó que como no habían aportado ninguna información al respecto citaba a ambos trabajadores del PSOE para que pudieran aportar información y deducir, en su caso, los correspondientes testimonios para su eventual investigación.