La directora del Programa de Brasil en el Diálogo Interamericano, Bruna Santos, explicó por qué el presidente Luiz Inácio Lula da Silva tuvo resultados positivos en su encuentro con su homólogo estadounidense, Donald Trump, en relación a los aranceles que le fueron impuestos a Brasil. Asegura que más que Lula sea un negociante duro, supo esperar el momento perfecto en el que se calmó la crisis política de Trump para “jugar el juego económico”. Señala que aunque aún no hay acuerdos, hay disposición para negociar.

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