El Juzgado de Instancia de Briviesca (Burgos) ha dejado en libertad provisional a la exabadesa Laura García de Viedma y a otra exmonja del monasterio de Belorado en la tarde de este viernes. La primera religiosa fue detenida este jueves, a la vez que un anticuario de la provincia de León —que también ha sido puesto en libertar— y solo unas horas después la Guardia Civil también arrestaba a la segunda. La Benémerita ha realizado estas detenciones en el marco de la operación MIRUM-CID, que investiga la presunta venta irregular de obras de arte pertenecientes al patrimonio histórico del convento de Santa María de Bretonera, según han confirmado la Subdelegación del Gobierno en Burgos.

Según la información facilitada por la Guardia Civil, los tres detenidos están siendo investigados por delitos de apropiación indebida agravada —al recaer en bienes catalogados como patrimonio histórico— y por receptación. La operación se inició tras detectarse en el mercado especializado de antigüedades varias obras catalogadas que podían corresponder al patrimonio del monasterio burgalés. Ante la sospecha de que estas piezas hubieran sido sustraídas o vendidas sin autorización, la Unidad Orgánica de Policía Judicial (UOPJ) de la Comandancia de Burgos abrió una investigación para determinar su origen y su posible recorrido ilícito.

Durante estas indagaciones, los agentes constataron la venta a través de internet de diversas piezas históricas pertenecientes a Santa María de Bretonera, así como la presencia en una tienda de antigüedades de Madrid de una figura de San Antonio de Padua del siglo XVII, atribuida al mismo monasterio. Esta obra habría sido ya recuperada por la Guardia Civil.

Como parte de la operación, se han realizado entradas y registros en el monasterio de Belorado y en el monasterio de Santa Clara de Orduña (Bizkaia). En ambos se han intervenido bienes muebles, esculturas, piezas artísticas y material informático, que ahora están pendientes de inventariar y serán puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Briviesca, que dirige las actuaciones. Durante el registro del cenobio vizcaíno, los agentes localizaron un número significativo de obras de arte pertenecientes a Belorado que habían sido trasladadas sin autorización.

Fuentes del entorno de las exreligiosas han señalado que, durante los registros, los agentes actuaron con inventario en mano para comprobar el patrimonio existente en cada convento. Según estas mismas fuentes, las actuaciones se extendieron desde primera hora de la mañana en Belorado hasta última hora de la tarde en Orduña, donde la Guardia Civil acudió para continuar la investigación y proceder al arresto de la segunda exmonja implicada.

La Guardia Civil ha subrayado que la investigación permanece abierta y no se descartan nuevas intervenciones. El instituto armado insiste también en la importancia de la colaboración ciudadana y recuerda que la información puede comunicarse de forma anónima a través del teléfono 062 o la aplicación Alertcops.

Las exmonjas de Belorado defienden la venta de antigüedades: “Es súper habitual”

Las exmonjas del monasterio de Belorado (Burgos) han defendido como “habitual” la venta de antigüedades en los conventos. Sor Sión y sor Belén, antes de acceder al Juzgado de Briviesca donde desde la una de la tarde prestan declaración las dos religiosas detenidas acusadas de apropiación indebida agravada, han explicado a los medios de comunicación que es “súper habitual” que los monasterios vendan antigüedades.

“En los monasterios hay gente -los anticuarios- que llaman para preguntar si se quieren vender”, ha indicado sor Sión, y ha asegurado que es “una cosa totalmente legal” para defender que la comunidad religiosa “hace con sus propios bienes lo que cree que es bueno para su familia”.

Ha negado que hayan vendido bienes que se consideren patrimonio del monasterio, que “tuvieran que quedarse en el convento”, y ha asegurado que no han realizado ninguna venta a partir de mayo de 2024 cuando anunciaron su salida de la Iglesia católica lo que les ha conllevado la excomunión.

Sor Belén ha indicado que los hechos que investiga la Guardia Civil, y por los cuales ha detenido a la exabadesa, otra exmonja y al anticuario de León, corresponden a ventas en 2023, cuando “sor Isabel era la abadesa legítima”, y la decisión la tomó la propia comunidad religiosa pues son bienes de su propiedad.

Sorpresa e incredulidad

Las exmonjas han admitido haber vivido con sorpresa lo ocurrido en las últimas horas, con los registros de los monasterios de Belorado y Orduña (Vizcaya) por parte de la Guardia Civil y las dos detenciones, y han indicado que harán valoraciones cuando sepan exactamente a qué patrimonio histórico se refiere la investigación.

Sor Belén ha insistido en que las ocho excomulgadas “son para lo bueno y para lo malo”, de ahí que hayan acudido este viernes por la mañana para apoyar a las detenidas junto con los abogados Enrique García de Viedma y Florentino Aláez, así como con el portavoz Francisco Canals.

Igualmente, han defendido la propiedad de los vehículos del convento y la decisión de donar uno de los que ya no usaban a afectados de la dana, ante la denuncia por uso indebido presentada por el comisario pontificio y por la que iban a haber declarado esta mañana en Briviesca, pero la vista se ha suspendido por una recusación contra la jueza.

Situación de las monjas ancianas

Paralelamente, en las últimas horas las exmonjas han denunciado en redes sociales que, junto con el registro efectuado en Orduña, la Guardia Civil estaría preparando la salida de las cinco monjas ancianas que allí residen y que fueron trasladadas desde Belorado el pasado mes de julio. Estas religiosas no están excomulgadas y, según el Arzobispado, constituyen la verdadera comunidad de clarisas. El 1 de agosto, una comisión judicial intentó sin éxito su traslado a otros conventos de la Federación de Clarisas, como medida cautelar autorizada por el Juzgado de Briviesca.

La Guardia Civil ha aclarado que su presencia en Orduña responde exclusivamente a los registros vinculados a la investigación sobre la presunta apropiación indebida de bienes catalogados, y no guarda relación con procedimientos civiles o canónicos referentes a la comunidad religiosa.

Dos causas penales abiertas y procesos de desahucio

Más allá de las detenciones practicadas en el marco de MIRUM-CID, la exabadesa de Belorado acumula otras dos causas penales en el Juzgado de Briviesca. La primera investiga un presunto delito de estafa por la venta de 1,73 kilos de oro propiedad de la comunidad, por los que habría obtenido 130.000 euros. En este procedimiento figuran también como investigadas otras dos exreligiosas. La segunda causa trata a la gestión de la hospedería del monasterio de Derio y a los intentos de registrar los conventos de Belorado, Derio y Orduña como sociedades civiles independientes de la comunidad religiosa.

A estas causas se suma un procedimiento civil en curso por el impago del contrato de compraventa del monasterio de Orduña. Las clarisas de Vitoria reclaman el cumplimiento del acuerdo por el que la comunidad de Belorado debía abonar 1,2 millones de euros entre 2022 y 2023, pagos que nunca llegaron debido al bloqueo por parte de la Santa Sede de la venta del monasterio de Derio, con la que las exmonjas pretendían obtener los fondos.

Además, permanecen pendientes de resolución los recursos presentados ante la Audiencia Provincial de Burgos contra la sentencia del Juzgado de Briviesca que declaró a favor de la Iglesia católica y ordenó el desalojo del convento de Belorado por parte de la comunidad cismática. A este frente judicial se ha sumado recientemente la admisión a trámite, por parte de un juzgado de Bilbao, de la demanda de desahucio en precario del monasterio de Derio.